Fimosis, como saber si la tengo o la tiene mi bebé
Que es la fimosis?
La Fimosis es la dificultad o imposibilidad para que la piel del prepucio, es decir, la piel que recubre el extremo del pene o glande, se retraiga.
Esta afección es una de las enfermedades en el pene más comunes.
La Fimosis constituye una patología frecuente en las consultas de pediatría. Aunque habitualmente es considerado un trastorno banal, es causa muchas veces de problemas secundarios, tales como balanitis de repetición, infecciones de orina, dolor en la erección, entre otras molestias.
En los adultos supone un problema sobre todo funcional (imposibilidad para mantener una relación sexual satisfactoria), en los niños es antes todo una cuestión de higiene.
En el caso del niño es primordial tener una buen flujo urinario de salida y poder limpiar la zona, dado que entre el prepucio y el glande se acumula una secreción blanquecina producto del proceso de descamación del glande, que se denomina esmegma, y que con frecuencia se contamina de bacterias patógenas dando lugar a las balanitis, infecciones locales dolorosas que con frecuencia supuran.
En ocasiones, y como consejo higiénico y para prevenir, se recomienda a los padres durante el baño, en los primeros días de vida del recién nacido, se intente echar para atrás el tejido para conseguir su perfecta apertura, alargar el frenillo y evitar la evolución a fimosis completa.
Hay que tener cuidado, sin embargo, para no causar lesiones, como desgarros del frenillo.
La solución a esta enfermedad es su operación.
Pero si te preguntas como saber si tengo fimosis lo mejor es que vayas a tu médico de cabecera.
Operación de la Fimosis
La fimosis se opera cuando impide orinar adecuadamente al niño porque el exceso de piel cierra la salida de la orina.
En personas mayores se opera cuando molesta para mantener relaciones sexuales, si en erección el glande no se descubre del todo o lo hace con mucha dificultad.
En ancianos con fimosis el meato puede llegar a cerrarse casi por completo de forma que también les impida orinar adecuadamente.
La operación de fimosis o también llamada circuncisión por fimosis, es una operación de mínimo riesgo y de corta duración.
Consiste en cortar y eliminar la piel que rodea el glande, total o parcialmente. Muchas veces se elimina lo suficiente para permitir que se retraiga con facilidad, pero permitiendo a la vez que el glande quede cubierto cuando está en reposo.
En ocasiones no es necesario recortar esta piel, y la operación se limita a eliminar las adherencias que impiden la movilidad.
Cuando la operación de fimosis se realiza en niños, se emplea anestesia local y sedación o anestesia total, mientras que en los adolescentes se prescinde de la sedación.
En todo caso se realiza en régimen ambulatorio y se utilizan suturas reabsorbibles que desaparecen por sí solas en 8 días.
La intervención no requiere hospitalización ni tratamiento antibiótico y el postoperatorio en casa son mínimos, limpieza, paracetamol y algo de lubricante urológico.
Posibles complicaciones de la operación de fimosis
Las hemorragias no suelen ser muy importantes y son controlables.
Es posible alguna infección que se trata de forma fácil con algún antibiótico.
También se pueden dar hematomas que obligaría al drenaje del mismo.
Contraindicaciones de la Operación de fimosis
Esta operación está contraindicada en bebés con malformaciones congénitas del pene, en bebés prematuros y en niños con trastornos hemorrágicos.